sábado, 30 de abril de 2016

“Cous Cous Limón Sefardí” #juegodeblogueros





Este mes no sabía qué hacer para el reto de #juegosdeblogueros ya que el ingrediente principal era el limón y aparte del pollo al limón, la tarta de limón que ya la hicimos  tarta de limón de Heston Blumenthal , el clásico bizcocho de limón o un helado de mojito no se me ocurría nada. Así es que para encontrar algo original primero empecé buscando recetas con limón y no veía nada, después busqué recetas crudiveganas de limón por si encontraba algo interesante o al menos diferente y luego le daba una vuelta. Nada. Después me puse a buscar recetas vegetarianas de limón y voilà encontré esta que me enamoró de la web nueva cocina marroquí. Pero ojo también está cambiada. Ahora os diré por qué.



Por lo visto este cous cous limón es de origen sefardí. Me encanta la cultura sefardí, su gastronomía, su tradición, su sentido de la familia. También la árabe, la de base, la del misterio…y bueno para qué queríamos más. Lleva una crema que es una especie de alioli pero sin huevo y aunque se llama cous cous limón es de naranja. Porque en muchas partes se llama limón a todos los cítricos salvo a las mandarinas que se les llama clementinas. Pero nosotros, como el ingrediente es limón, lo hemos hecho de limón de verdad.

Vamos con la receta.





COUS COUS LIMÓN

Los secretos (2 personas)
80 gramos Cous cous integral bio
2 limones
1 ramilletes de menta grande
1 ramilletes de estragón fresco. No lo hemos encontrado, así es que hemos puesto el estragón seco.
Semillas de fenogreco
Azahar para hacer infusiones
Miga de pan blanco
Un diente de ajo
Aceite de oliva virgen extra


La pócima
1.    Cocemos el cous cous
2.  Mientras hacemos una infusión con las hojas de azahar
3.   Echamos sobre el cous cous un vaso de la infusión de azahar.
4.  Aliñamos el cous cous con la menta, el estragón, y las semillas de fenogreco machadas, añadimos el aceite y sal.
5.  Reservamos.



6.  Ahora hacemos una especie de alioli de limón de una forma super original y sin huevo. Está deliciosa.
7.   Realizamos un zumo con los limones.
8.  Echamos en un vaso batidor el zumo, el pan hasta que se empape, el ajo y vamos batiendo y echando aceite hasta formar una crema de textura fina y el espesor que os guste.



¡Y a comer!

Exquisita combinación de sabores, el limón quedó ideal, no sé cómo es con la naranja pero desde luego repetimos seguro.
El mundo es fantástico y está lleno de sabores mágicos.

Os paso los links de mis compis para que veáis cuantas recetas se pueden hacer con limón y tan distintas.



By K-lerit & Kob



domingo, 10 de abril de 2016

Bocadillos #slowfood de colores para el género policíaco #entrelibrosandaelguisoTS





Devoradora de libros. Esa soy yo pero estos dos meses he leído menos, no porque no quiera, sino por lo que pasa hoy en día. Sí, la falta de tiempo.




Pero, me quedé bloqueada con el reto de abril de @typicalspanish. Sí, también me pasa últimamente mucho. Me bloqueo, porque me pongo a pensar y Rien de Rien que dicen nuestros vecinos galos. Y es que el reto de abril era un desafío en toda regla: Teníamos que elaborar una receta de algún libro que no fuera de recetas.

¡Toma ya! ¿Cómo se te ha quedado el cuerpo?

Y yo por más que pensaba es que no veía la receta en los libros o no me inspiraba. Soy de impulsos y no me enamoraba nada, salvo el “Nombre de la Rosa” que me impactó la primera vez que lo leí, pero que de comida no hay ni un mija. Pensé en realizar un bocadillo con panecillo negro, por la tinta con la que morían todos los que leían el libro prohibido. Y me lo volví a leer. Lo tenía claro…




Pero… luego vi que hablabais de policías, de lo mal que comían… por las redes y ya me fui a mi Kurt Wallander. 
Así es que pensé en mejorar el género policíaco convirtiendo su fast food en slow food con bocadillos de panes de colores y con ingredientes super saludables y de nuestra dieta mediterránea y española. Olé.

Bocadillos que también se pueden llevar a la oficina o a la comisaría para degustar poco a poco,  en lugar de engullir. Os aseguro que aunque son mini de tamaño como el círculo de un vaso pequeño llenan mucho. No pudimos comernos enteros nada más que dos; el negro y el rosa, del verde y rojo tomamos la mitad porque queríamos probarlos, claro. Así es que ya veis, llenan.

Os dejo de rollos y lanzo una llamada a mi Wallander para que me haga caso, soy su nutricionista de ficción, y empiece ya a comer como Dios manda.

Vamos ya con la receta que la hemos tenido que hacer en dos días porque lleva tiempo y aunque parece complicada no lo es. Es cuestión de orden nada más. Es sencilla, y cuando le coges el truquillo, ya sale con los ojos cerrados.

RECETA DE MASA DE PAN DE BOCADILLO DE COLORES


Los Secretos (10 panecillos de cada color)

500 gr. de harina de fuerza. Nosotros la hemos utilizado bio.
80 gr. de azúcar
10 gr. de sal
100 gr. de mantequilla
250 gr. de leche
30 gr. de levadura fresca
Con esta receta vamos a elaborar panecillos de cuatro colores con colorantes naturales. Estos colores serán negro, para el que usaremos tinta de calamar, verde, para el que usaremos espinacas, también se pueden usar pistachos molidos, Rosa, que lo lograremos con remolacha y rojo marmolado, para el que utilizaremos tomates, pimentón, colorante de paella y zanahoria. 

Los Secretos de colores
Pan de tinta de calamar
15 gr. de tinta de calamar
Pan verde de espinacas
30 ml de jugo de espinacas. Licuamos las espinacas hasta obtener los 30 mililitros. Reservamos
Pan rosa de remolacha
30 ml de jugo de remolacha. Licuamos una remolacha hasta obtener los 30 ml. Reservamos.
Pan rojo marmolado– amarillo de tomate y zanahoria
Dos tomates, pimentón, colorante de paella y una zanahoria. Licuamos los tomates, la zanahoria y reservamos por separado.

La pócima (cuatro pocimillas)
Dividimos las cantidades de los ingredientes (o hacemos esas cantidades para cada una de las masas pero salen muchos panes) en cuatro partes para hacer las masas de los cuatro colores. Y después empezamos por la primera masa.


Introducimos en la amasadora o kitched Aid, o la que tengamos los ingredientes en el siguiente orden: la harina, la mantequilla fundida, la leche tibia con la levadura diluida y la sal en una esquina. Ponemos en marcha y vamos añadiendo los ingredientes de color, primero el que hayamos elegido, nosotros pusimos primero la tinta de calamar o sepia.



Dejamos que se integre todo bien hasta conseguir una masa negra y brillante. Si amasamos a mano tendremos que trabajar un poco más, pero también es posible. Dejamos reposar en un bol hasta que la masa duplique el volumen.


Cuando la masa esté levada, espolvoreamos una tabla con un poco de harina y sacamos el aire. Cortamos porciones y hacemos las bolas de unos 20 -40 gramos.




Limpiamos el bowl de la Kitchen Aid y repetimos la operación. Después cogemos otra vez una de las partes de ingredientes de masa que queda y hacemos la misma operación, echamos en la amasadora los ingredientes y añadimos el ingrediente del color, en nuestro caso el de espinacas para el verde.

Cuando la masa esté levada, espolvoreamos una tabla con un poco de harina y sacamos el aire. Cortamos porciones y hacemos las bolas de unos 20 -40 gramos.

Y lo mismo para los panecillos de remolacha.



Para el rojo marmolado la operación fue distinta. Nos confundimos y en lugar de integrar los zumos en la masa, amasamos primero y luego echamos los jugos y se quedó así. Menos mal que no tuvimos que tirarla porque quedó bonita, pero no ha sido un éxito de investigación. ;) jajajaja.



Cuando las masas estén levadas, ahora ya para todas, espolvoreamos una tabla con un poco de harina y sacamos el aire. Cortamos porciones y hacemos bolitas de unos 20 – 40 gramos.



 

Cubrimos con un paño y dejamos que vuelvan a subir, y entonces humedecemos los panecillos con un poco de agua y espolvoreamos:
La masa negra con semillas de sésamo tostado,






La verde con pimienta verde para darle un toque picantito o semillas de hinojo para un toque anisado.





La de remolacha con semillas de amapola.





La roja marmolada con nada para que se vea el bonito efecto de las capas.




Colocamos las bolitas en una bandeja de horno sobre papel sulfurizado.




Calentamos el horno a 180º C y colocamos la bandeja en la mitad del horno y horneamos los panes durante 14-15 minutos dependiendo del horno. 




Dejamos reposar sobre una rejilla para que se enfríen del todo.





              


Una vez que tenemos los panecillos, es el momento de preparar cortar los panecillos y elaborar los rellenos:





Rellenos de los Bocadillos Slowfood
Bocadillo de calamar con tinta negra.
200 g de calamar
1 cucharada de sal
Aceite de oliva
Harina para freir

Salsas para acompañar: Alioli de pera
Ali-oli
1 Pera
Se bate la pera y se mezcla con el ali-oli. Es deliciosa.
Picamos los calamares y lo mezclamos con la sal y harina hasta y freímos.

Emplatado
Ponemos los calamares fritos y encima una buena cucharada de la salsa de alioli de pera.  



Bocadillo de espinacas
Pimiento del piquillo
Queso de oveja curado
Espinacas frescas
Sano, nutritivo y fácil de realizar.

Emplatado
Ponemos las hojas de espinacas, encima los pimientos del piquillo cortaditos y acabamos con el queso de oveja.


 Bocadillo de remolacha
200 g de carne picada de ternera
Queso
Mostaza
Hojas de lechuga

Se hacen los filetes de la carne picada del tamaño del panecillo y se doran en la sartén.

Emplatado
Se unta con un poco de mostaza, sobre ella se pone el filete, después la hoja de lechuga y un poquito de queso.



Bocadillo rojo marmolado
Salmorejo (nosotros también lo hemos hecho pero se puede comprar ya hecho, en Mercadona lo venden todo el año en unos bricks pequeños y están bastante aceptables)

Huevos duros (depende de los que vayáis a elaborar de este tipo)

Jamón ibérico de bellota o lomo ibérico de bellota cortado en cuadraditos pequeños.

Emplatado
Se unta con dos o tres cucharadas de salmorejo el panecillo, después se coloca huevo duro encima y se acaba con el jamón o lomo.



¿Y qué más os puedo decir? Qué además de que están riquísimas, son Spanish totales para comer sólo o acompañado y sobre todo para no comer más comida basura, sino comida #slowfood que los policías también pueden comer sano y despacio aunque sea en el propio trabajo. ;)

Por cierto, os paso el link de mis compañeras de abril de #entrelibrosandaelguiso que seguro que aprenderéis mucho tanto de libros como de recetas.

¡Buen provecho!

By K-lerit & Kobb



martes, 5 de abril de 2016

Pincho taco de bogavante: huerta y mar de @Xef_Ruscalleda @cookingthechef









Los retos de April’s Kitch  y Aisha de La Cocina de Aisha  cada mes son más difíciles o al menos imponen más. En marzo nos han propuesto para el reto cooking the chef  a CARME RUSCALLEDA @Xef_Ruscalleda. Toma ya, ni más ni menos que la única mujer que tiene en su haber siete estrellas Michelín. Pues claro, te pones a pensar en su  mejor receta o la más complicada y dices, va este mes ni participo, para qué, si además de que me va a salir una… no tengo herramientas para hacer algunas de las recetas que me gustan, ya sabéis las complicadas.

Recordé que tenía un libro de ella, el de “cocinar para ser feliz” y la  verdad las recetas me gustaban pero no había ninguna que me enamorara. También tengo una revista de “el mueble” que la dedicaban cada mes a tres grandes chefs y ella venía en una de esas revistas pero ni así. No me inspiraba.


Miré una de sus recetas de Madrid Fusión y me entusiasmó pero era imposible de hacer. Vamos que ni en mis mejores sueños. Así es que antes de tirar la toalla me puse a mirar por las redes a ver qué encontraba. Y tampoco. Pero… al final encontré está, que me pareció un poco cara pero muy divertida, con muchos ingredientes pero en pequeñas dosis, que son las que me gustan. Se trata de un pincho que elaboró en Canal Cocina para el programa “El rey del pincho” y al no encontrar todos los ingredientes, algunos los he sustituido por otros que también les va genial y tienen mucho color.



Sólo como apunte decir que Carme nació en el seno de una familia agricultora y comerciante, estudió el oficio de charcutera, además de comercio mercantil, y se incorporó al negocio familiar (una charcutería) junto a su marido.

Una mujer con mucha visión, incorporó enseguida una sección de platos caseros para llevar. Compró la torre de delante de su tienda para abrir junto a su marido Toni Balam, en julio de 1988, el restaurante Sant Pau, que en tres años consiguió su primera estrella de la Guía Michelín.


En 2004 abrió un restaurante de cocina catalana en Tokio, también llamado Sant Pau. En la actualidad es la única mujer del mundo que posee siete estrellas de la Guía Michelín, tres por su restaurante Sant Pau en Sant Pol de Mar (Barcelona), dos por Moments, en Barcelona al frente de cuyas cocinas se encuentra su hijo Raül Balham y dos más por el restaurante Sant Pau en Tokio.



En España es la cocinera con más estrellas de la Guía Michelín,  y cuenta además con la máxima calificación (tres soles) de la Guía Campsa-Repsol.

Su cocina está fundamentada en la tradición cocina catalana, pero dando siempre un toque de modernidad. El hecho de abrir un restaurante en Japón, y sus consecuentes viajes al país, ha hecho que se interese por algunas técnicas culinarias de ese país, adaptándolas a la cocina y productos catalanes.




Lo que realmente me gusta, es que se preocupa por que su cocina sea saludable, por lo que se centra en los productos de temporada de su tierra, añadiendo "cierta poesía" a lo que cocina. A menudo mezcla referencias literarias en sus creaciones culinarias. Trabajadora, alegre y generosa, no duda en transmitir sus conocimientos en publicaciones editoriales para el gran público.

Vamos ya con nuestra aportación.

PINCHO TACO DE BOGAVANTE: HUERTA Y MAR 





Los Secretos (4 personas)
1 Bogavante limpio
2 cucharadas de huevas de bogavante. Hemos sustituido por huevas de arenque
2 cucharadas de caviar de bogavante. Hemos sustituido por caviar de wasabi
2 cucharadas de caviar de aceite. Hemos sustituido por caviar de yuzu.
4 Tomates cherry
1 Lima
Masa para tortitas
Aceite de oliva

Para el aliño picante:
1 diente de ajo
2 Pimientos del piquillo
1 Cayena
Sal
Aceite de oliva

Para la vinagreta:
1 chorro de aceite
1 chorro de vinagre
1 pizca de sal
1 cucharada de mostaza
1 Cebolla
1 Manzana
1 Apio

Para el pesto:
1 puñado de hojas de albahaca
1 diente de ajo
1 puñado de piñones
1 puñado de queso parmesano rallado
1 chorro de aceite
1 pizca de sal
1 Alga nori


La Pócima
Para preparar la receta de Taco de bogavante huerta y mar:

En primer lugar, cortamos la manzana en láminas finas y las picamos para dar el aspecto de sémola. Picamos también el apio.

Por otro lado, vamos a preparar un aliño picante. Para ello, en una sartén con aceite, doramos el ajo laminado. Incorporamos los pimientos de piquillo troceados y la cayena. Salamos y trituramos muy fino.

Después, preparamos la vinagreta. Mezclamos en un bol un chorro de aceite, un chorro de vinagre, una pizca de sal, una cucharada de mostaza, la cebolla picada, la manzana y el apio. Reservamos.

Preparamos el pesto. En el vaso de la batidora, trituramos la albahaca, una punta de ajo, un puñado de piñones, el queso parmesano, un buen chorro de aceite, una pizca de sal y el alga nori. 




En la receta original se escaldan los tomates para quitarles la piel y se rellenan del pesto, con ayuda de un biberón. Nosotros los hemos cortado tipo ensalada y hemos salseado con el pesto.

Preparamos las tortitas siguiendo las indicaciones del fabricante. Freímos los circulitos pequeños de tortita en una sartén con una gota de aceite.

Por último, cortamos el bogavante en trocitos y los marcamos en una sartén.

Emplatamos sobre la tortita la mezcla de cebolla, trocitos de bogavante, los cherry, el aliño picante y las algas variadas. Rallamos un poco de lima por encima.



Terminamos con los caviares de arenque que le da un toque ahumado, wasabi con un ligero toque picante y yuzu con sabor cítrico. Una delicia para el paladar.





La verdad es que teníamos nuestras dudas si nos gustaría o quedaría bien pero el resultado ha sido excelente. Nos ha encantado y os animo a probarla. Eso sí, es cara.





Os dejo también el enlace donde podréis ver qué han hecho el resto de compis en este reto de Carme Ruscalleda

By K-lerit & Kobb