Nos
hace mucha ilusión (a codigosecreto280 – K-lerit & Kobb) estar de nuevo con
vosotros con aire renovado y participando en un reto muy interesante
concretamente en Cooking the Chef que organizan Abril de April’s Kitch y
Aisha deLa Cocina de Aisha
¿En
qué consiste?
Cada
mes proponen un Chef muy conocido, y se trata de preparar una de sus recetas o
bien una receta propia inspirada en su estilo de cocina… En definitiva, se
trata de conocer al chef propuesto, indagar sobre su cocina y su trayectoria,
profundizar en sus platos y su forma de cocinar… y como homenaje tratar de
emularlo. Este mes no os desvelaremos su nombre para ver cuánto sabéis de él y
quién lo acierta. De todos modos, lo importante es pasar el rato emprendiendo
nuevos retos y aprendiendo cosas nuevas.
En
esta ocasión hemos elegido hacer una receta propia de el chef propuesto, un
plato que representa a un país, Perú, y nosotros al igual que el chef hemos
incluido toques asiáticos y alguno mediterráneo.
Ruge como un felino con Leche de Tigre {Reto Cooking the Chef }
En Facebook del chef propuesto este mes, del Chef internacional que ha elevado la
cocina peruana a los altares más altos de la gastronomía mundial, podemos ver
una curiosa y divertida anécdota en cuanto al origen de la receta. Os la
contamos aquí:
Una pareja de turistas llega a una cebichería limeña.
- Señor, ¿por qué al jugo del cebiche se le llama leche de tigre?
- Señora porque cuando uno se lo toma, se convierte en un tigre.
- ¡oh! ¡Wonderful! Por favor, dos vasos para mi esposo. Es muy muy urgente.
Llega la leche de tigre.
- Señor pero esto es en realidad un cebiche.
- No señora, un cebiche tiene un poco menos de leche de tigre y mucho más pescado
y marisco. En realidad antes se servía en un vasito solo con uno que otro
pedazo de pescado, pero todo cambio desde que un restaurante lo convirtió en un
plato.
- ¿Qué restaurante?
- Hace unos años una familia vendía cebiche en una carretilla enfrente del estadio
del club Alianza Lima.
Los jugadores solían ir después de entrenar, cansados, sin energía y casi
siempre con prisas. Los dueños, agradecidos por la fama que ellos les traían,
empezaron a regalarles unos vasitos del leche de tigre tan ricos que pronto
irían desplazando en fama a su propio cebiche. Gracias a ellos, la familia pudo
al cabo de unos años, inaugurar frente al estadio un local grande y hermoso: La
cebicheria “El verídico de Fidel”
- Señor y ¿Esa cebicheria aún existe?
- Claro señora, ahora tienen tres locales. Fue su hijo, Juan Carlos el que
hizo crecer el verídico. Su familia sigue con la misma fuerza. Desde entonces,
su vasito de leche de tigre se convirtió en una celebridad. Es un concepto que
hoy está presente en todas las cebicherías de Lima y fue “El verídico de Fidel”
quién lo convirtió en un plato.
- ¡Hummm! Delicioso, comenta el esposo. Y continúa, Siento algo
extraño en mi cuerpo, ¡Oh amor!, ¡qué hermosa estás! Algo me sucede. Estoy
sudando.
La esposa se agita.
- Señor por favor ¿Me puede dar la receta? Es de vida o muerte. Le daré una
gran propina.
- No señora. No es necesario. En Perú, los cocineros no nos guardamos los
secretos. Aquí no competimos le daré la receta encantado.
- Señora porque cuando uno se lo toma, se convierte en un tigre.
- ¡oh! ¡Wonderful! Por favor, dos vasos para mi esposo. Es muy muy urgente. Llega la leche de tigre.
Los jugadores solían ir después de entrenar, cansados, sin energía y casi siempre con prisas. Los dueños, agradecidos por la fama que ellos les traían, empezaron a regalarles unos vasitos del leche de tigre tan ricos que pronto irían desplazando en fama a su propio cebiche. Gracias a ellos, la familia pudo al cabo de unos años, inaugurar frente al estadio un local grande y hermoso: La cebicheria “El verídico de Fidel”
- Señor por favor ¿Me puede dar la receta? Es de vida o muerte. Le daré una gran propina.
- No señora. No es necesario. En Perú, los cocineros no nos guardamos los secretos. Aquí no competimos le daré la receta encantado.
Los secretos (para 2 felinos):
20 gramos
de pescado blanco para triturar+ 50 gramos de pescado blanco en dados pequeños,
1 cucharada sopera de apio picado,
Cilantro fresco,
Guindillas asiática roja,
Cebolla roja picada,
10 gramos de jengibre rallado,
8 limones,
Caldo de pescado,
Sal y pimienta,
4
langostinos,
4 almejas,
4 vieiras,
1 calamar / pulpo.
1 calamar / pulpo.
La pócima
- Colocamos en un bol los 20 gramos del pescado blanco, el apio, una rama de cilantro, guindilla, cebolla roja picada, jengibre rallado, sal y pimienta.
- Se deja dos minutos para que se mezclen los sabores y aromas.
- Se pasa todo a una licuadora y se añade, dos vieiras sin el coral, el jugo de unos 5 limones y un chorrito de caldo de pescado pero muy suavecito. Se Licua todo hasta obtener un jugo ligeramente cremoso.
- En otro bol colocamos los langostinos, las vieiras, almejas picadas, un calamar picado, el resto de pescado blanco en dados pequeños, sal, pimienta, guindilla al gusto, cebolla picada, cilantro picado. Se mezcla todo y se añade el jugo de cuatro limones. Se añade todo lo del otro bol. Se prueba el punto de sal y de picante.
- Se sirve en vasitos. Una leche de tigre cremosa, picante, ácida, generosa y ligeramente fría. Lo importante es que quien la tome, sienta lo que sintió el protagonista de la anécdota y que despierte nuestro tigre feroz y hambriento.
Yo no se si hemos despertado tigres hambrientos pero la receta es esquisita!!! Hemos coincidido en hablar sobre la leche de tigre, en mi caso salteando un tiradito de vieiras y haciéndola solo con marisco :) pero está súper buena!!! Un beso
ResponderEliminarjajajja. Seguro que el tiradito de vieiras está para enjaular a más de uno ;). Besos.
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